LA MARCHA DE LAS GENTES DE BIEN

"Por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas”

Este sábado a las cinco de la tarde hora taurina por excelencia, como no podía ser de otra manera las gentes de orden vuelven a tomar la calle, esa calle que les pertenece se verá inundada de sotanas y de trajes de los domingos, estos últimos supongo que religiosamente pagados por sus portadores, se reúnen todos ellos con la pía intención de pedir por nosotros, seres sin corazón que abominamos del derecho a la vida, que vamos asesinando tiernos infantes nonatos.
Creo que encabezaran la marcha aparte de algunos obispos, grandes personajes defensores a ultranza de la vida, como el innombrable salvador de multitud de ellas al negarse a acudir a una guerra ilegal, o el mismísimo Mayor Oreja y su placida vida en tiempos de ese otro gran defensor de la vida su CAUDILLO, tipos que encabezan todas las marchas que se hacen contra las guerras, el hambre o la pobreza.

Estas gentes de orden deben de agradecernos a nosotros pobres piojosos, rojos, melenudos, carentes de moral alguna, el enseñarles el camino.
Después de tantas marchas contra las guerras, las injusticias, las tiranías, después de alguna que otra carrera delante de algún guardia, bajo la inquisidora mirada de estas gentes de bien, por fin han visto la luz y salen a la calle todos ellos ordenaditos, han cambiado los rosarios, el portar imágenes, el desfilar en silencio, por pancartas y piadosos lemas coreados cuales cantos gregorianos.

Amigos prepararos por que ante tamaña multitud elevando sus oraciones por nosotros, creo que habrá gran actividad en el infierno, preparando la llegada de todos nosotros, con las calderas funcionando a todo trapo, casi una jornada de puertas abiertas.
Ya veis los rojos, los piojosos, los maricones, los titiriteros, los melenudos a sus quehaceres y las gentes de orden y misa diaria de manifestación, como dice esa antigua canción infantil “por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas”