Dedicado a un poetastro de tres al cuearto y a su vil alcaldesa.LOS COBARDES
Hombres veo que de hombres
sólo tienen, sólo gastan
el parecer y el cigarro,
el pantalón y la barba.
En el corazón son liebres,
gallinas en las entrañas,
galgos de rápido vientre,
que en épocas de paz ladran
y en épocas de cañones
desaparecen del mapa.
Estos hombres, estas liebres,
comisarios de la alarma,
cuando escuchan a cien leguas
el estruendo de las balas,
con singular heroísmo
a la carrera se lanzan,
se les alborota el ano,
el pelo se les espanta.
Valientemente se esconden,
gallardamente se escapan
del campo de los peligros
estas fugitivas cacas,
que me duelen hace tiempo
en los cojones del alma.
¿Dónde iréis que no vayáis
a la muerte, liebres pálidas,
podencos de poca fe
y de demasiadas patas?
¿No os avergьenza mirar
en tanto lugar de España
a tanta mujer serena
bajo tantas amenazas?
Un tiro por cada diente
vuestra existencia reclama,
cobardes de piel cobarde
y de corazón de caña.
Tembláis como poseídos
de todo un siglo de escarcha
y vais del sol a la sombra
llenos de desconfianza.
Halláis los sótanos poco
defendidos por las casas.
Vuestro miedo exige al mundo
batallones de murallas,
barreras de plomo a orillas
de precipicios y zanjas
para vuestra pobre vida,
mezquina de sangre y ansias.
No os basta estar defendidos
por lluvias de sangre hidalga,
que no cesa de caer,
generosamente cálida,
un día tras otro día
a la gleba castellana.
No sentís el llamamiento
de las vidas derramadas.
Para salvar vuestra piel
las madrigueras no os bastan,
no os bastan los agujeros,
ni los retretes, ni nada.
Huis y huis, dando al pueblo,
mientras bebéis la distancia,
motivos para mataros
por las corridas espaldas.
Solos se quedan los hombres
al calor de las batallas,
y vosotros, lejos de ellas,
queréis ocultar la infamia,
pero el color de cobardes
no se os irá de la cara.
Ocupad los tristes puestos
de la triste telaraña.
Sustituid a la escoba,
y barred con vuestras nalgas
la mierda que vais dejando
donde colocáis la planta.
Muy buena elección querido Severino, perfecto. Ellos no entendieron que los poetas se pueden matar pero no silenciar. Es doloroso pensar en todos esos versos que no vamos a conocer ya que si fue tan prolífico yendose tan solo a los 31 años todo lo que hubiera podido darnos si no lo hubieran dejado morir.
ResponderEliminarAbrazo
No conocía este poema, pero no te podía quedar mejor dedicándoselo a ese poeticastro de tres al cuarto.
ResponderEliminarSalud, República y Socialismo
Los canallas de reducido cerebro invertebrado tienden a levantar el brazo derecho con la palma extendida. ¡Respetad la poesía por lo menos!
ResponderEliminarUissss.... qué mala leche me entraaaaa....
un abrazo
Chapeau , Seve.
ResponderEliminarSaludos
Y es que ahí siguen demostrando con su prepotencia lo que son : unos analfabetos
ResponderEliminarsaludos
Un abrazo solidario
ResponderEliminarOs espero en mi blog con mi comentario
Grande,muy grande.La palabra y la lucha.El coraje y la pluma
ResponderEliminar_________________________
Éste lo desconocía y me ha emocionado sobremanera.
Abrazos
Maravilloso, te lo dice uno que escuchó más de mil veces que era un cobarde. Saludos.
ResponderEliminarMágnifica entrada seve,hoy más que nunca todos
ResponderEliminarcon Miguel Hernández.Un besico
Severino, magnífico poemos, eres un crac tío.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Wenas!! Este es probablemente uno de los poemas que más me gustan de Miguel Hernandez. Bonito homenaje.
ResponderEliminarSaludos!!
Sólo son cobardes de piel cobarde,
ResponderEliminarque van dejando mierda por donde pasan
porque son escoria que nunca supo respetar
la libertad ni la palabra.
aggg¡¡¡ qué asquito me da esta gentuza.
buena entrada Severino
un abrazo
¿Se puede llegar en barco a Orihuela para capar a semejante imbécil? ¡Lástima! En todo gran pueblo nace el famoso "tontolpueblo"
ResponderEliminar:)
lamentablemente de éstos está lleno....son como parásitos..
ResponderEliminarHas elegido quizás el mejor poema que se les podía dedicar a los que se aprovechan de su posición para ultrajar la memoria del que no se puede defender. Menos mal que nos tiene a muchos que lo hacemos por él.
ResponderEliminarSaludos
Muy bonito poema de Miguel Hernandez.Has empezado fuerte este año Severino ,sigue asi.saludos.
ResponderEliminarEs mi poeta preferido, Miguel Hernández, alguna vez colgué algún poema de él en mi blog.
ResponderEliminarSaludos.
También me sumo. Recién vuelta a la blogosfera.
ResponderEliminarUn abrazo
versos universales
ResponderEliminarque en defensa de ideales
la poesía es punta de lanza
con muchos relevos para portarla
besitos de luz Severino
felicidades
Severino:
ResponderEliminarLas palabras son muy díficiles de eliminar, mas aun si estan escritas. Me ha gustado mucho este poema
Saludos
No conocia este poema y me gusta mucho y vigente ya lo creo.
ResponderEliminarA todos ,soy un tipo que no soy dado a entender facil la poesia y Miguel es un de los pocos que puedo decir que lo comprendo a la primera,quizas por eso se diga que es un poeta del pueblo,por eso molesta que quienes no son capaces de entender que las gentes normales disfrutemos de la cultura en vez de aplaudirles sus tontadas pretendan ultrajarle,aunque nunca podrian Miguel queda fuera de su alcance,gracias por vuestros comentarios un saludo a todos.
ResponderEliminarNo se de que va el poema pero muy bien escogido esta.
ResponderEliminarMagnífica.
ResponderEliminarFelicidades por el poema y por su santo, San Severino.Santo que tenia el don de la profecia y el don del consejo,dos preciosos dones que el Espiritu Santo regala a quienes, como usted,le rezan con mucha fe.
ResponderEliminarAfortunadamente Severino, las balas no pueden acabar con la poesia.
ResponderEliminarSi, se puesde matar al hombre pero jamás acabarán con su magnífica obra.
Gran entrada severino, un saludo.
Salud y República!!
Nexus.
S,Renato y Nexus lo dicho y gracias por acercaros y comentar.
ResponderEliminarHe vuelto ¿había estado?
ResponderEliminarTe copio este poema, el más ¿claro? y definitorio -a mi parecer, nada experto- del sentimiento de Miguel respecto de Sus Compañeros Intelectuales que Levanataron el ala en cuanto olieron el humo de las batallas.
Besos. En principio he hecho idea de publicar uno cada fin de mes, siguiendo la propuesta de una mujer en el blog de RgAlmazán, a la que no sé si se ha dado respuesta general.
Yo sí se la doy en particular. ¿Te di besos: PAQUITA