LOOKING FOR PERICO

Ayer tuve un ataque de nostalgia, recordé a Perico un autentico maestro estilista (el peluquero del barrio) un gran profesional siempre solicito para atender todas las pretensiones en asuntos de imagen de toda la chavalería del barrio. Pero que siempre conseguía un curioso resultado nunca acertaba con nuestros gustos ya que todos acabábamos con una imagen de la almendra similar, no en vano antes de enviarnos a que Perico empeñara todo su arte en la imagen de nuestras cabezas nuestras madres habían pasado a dejarle las oportunas instrucciones, pero eso si poseía el don de dejarnos convencidos.
Siempre he pensado que en este mundo hay varios templos del conocimiento, la enciclopedia británica ,un buen puñado de facultades, la wikipedía , los autobuses de empresa y las peluquerías de caballeros lugares donde se puede encontrar información desde los últimos resultados deportivos a la lista de emperadores de la dinastía Ming, pasando por supuesto por la solución de todos los problemas mundiales, por cierto estos tipos que andan reunidos por Copenhague seguro que no han ido a pelarse jamás a una peluquería de caballeros.
Ayer cometí traición al gremio de peluqueros y asistí a mi pelada trimestral a una peluquería de señoras, perdón que creo que ahora se denominan unisex, también he de admitir que asistí gracias a que mi pareja reservo cita sino creo que hubiera sido pelada semestral, ya que un servidor y los asesores de imagen andamos algo discutidos.
Todos habréis oído la famosa frase “andas mas perdido que un galápago en un garaje “pues así es como me encontré yo nada más entrar en dicha peluquería unisex, efectivamente era unisex solo había señoras, me sentaron en un trono enfrente de un espejo y procedieron a la faena ,entonces es cuando tuve ese tremendo ataque de nostalgia, las conversaciones sobre deportes, coches ,mujeres y demás interesantes temas habían sido sustituidas por otras en las que se hablaban de piercing,tatuajes y se repasaban los diferentes realitiis de las muchas televisiones del imperio, ni siquiera nadie se atrevía a meterse con el gobierno, ni un triste comentario del estilo “Zapatero marica la tiene chiquitica”, tan solo una joven soldado criticaba a la ministra por que no le subía su sueldo de mileurista,mientras tanto yo giraba la vista buscando el banco donde esperabas tu turno escuchando esas estupendas conversaciones o leyendo ávidamente el marca ,pero Perico con su chaquetilla blanca de botones cruzados, no estaba.